Hay que decirlo. Nunca es la mejor opción ser o hacer varias cosas a la vez. Las cosas como son. Pero si que hay modelos óptimos para cada situación y contexto. Esto es el mío que seguramente no es igual al tuyo. Lo que me funciona a mi no tiene que hacerlo de la misma forma a ti.
Tengo una “estructura”
Estructura es un término muy frio para lo que tenemos. Es un equipo implicado que hace posible todo esto. Sin ellos yo no haría nada. Las cosas como son. Adicionalmente tenemos recursos como almacenes propios y posibilidades de inversión aunque sea con dinero prestado del banco.
Esto no ha surgido de un momento a otro. Ha sido un proceso inicialmente muy lento que ahora ya lleva ocho años en curso donde se ha reinvertido y al principio nada más invertido porque beneficios no había o bien eran demasiado pequeños. Ahora estamos en una fase de aceleración. Hará cosa de cuatro años a nivel de números hubiera sido lo más razonable de cerrarlo todo y de centrarme en la consultoría porque de forma objetiva es lo más rentable.
Como soy cabezón e ignorante (al menos en eso momento donde no tenía sentido económicamente) estamos aquí todavía. Incluso en un punto mejor que nunca donde vamos casi duplicando los números de un año al próximo. Las cosas avanzan porque hay personas trabajando en esto.
Tengo organización
Y tampoco es la mejor pero es suficientemente buena. Me tengo que dividir entre proyectos de consultoría y empujar mi propio negocio. Esto va en fases. En mayo p.ej. he podido dedicarme al 100% a mis propios negocios lo que a largo plazo (al menos en esta fase de evolución del negocio) no es bueno. La parte positiva es que si se nota la diferencia de mi estar muy encima a estarlo menos.
Mi proyecto actual me exige mucho. Aun así busco siempre encontrar huecos en la agenda para generar nuevo negocio pero más importante todavía, para cuidar y regar todo lo existente.
Sin tener cada hora del día reservada para alguna actividad o tarea no sería posible hacerlo posible. Ya he hablado con frecuencia sobre este tema pero no se puede enfatizar lo suficiente. Sin organización surge caos. Improvisar no es la solución.
Para mi la clave está siendo esto.
- Reuniones recurrentes con el equipo: tengo un equipo joven y en muchos campos con poca experiencia. Mi punto de vista en ocasiones ayuda desenredar tareas complejas de forma más rápida. También aporto a nivel de afinar prioridades para que trabajemos con mayor fuerza en los temas realmente importantes.
- Sprints de dos semanas: todo va en tareas. Seguimos con Scrum aunque hemos dejado de afinar y mejorar el proceso. Se ha convertido en una rutina pero hay pequeñas cosas donde hemos perdido un poco la disciplina y euforia del inicio. Aun así todavía nos aporta una gran ventaja a nivel de organización de tareas.
- Ayuda en Alemania: este año serán incluso dos viajes de las dos personas con más experiencia del equipo a Alemania. Me echarán un cable en Alemania para organizar todo lo que hay aquí porque no tengo ni el apoyo ni la capacidad ahora mismo de sacarlo adelante sin ayuda.
El modelo híbrido no es para todo el mundo. Tampoco lo será para mi para siempre. Posiblemente un par de años más tendré que aguantar porque de momento compensa.
Stay tuned.