Nunca sabemos lo que puede ocurrir en nuestra vida y que requiera un desembolso económico inesperado: una avería en el coche o en la casa, una enfermedad, perder el trabajo…
Por eso, es muy recomendable contar con un fondo de emergencia, un recurso al que podemos acudir única y exclusivamente si se dan esas situaciones extraordinarias e imprevistas.
Kamila te cuenta cómo debes crear ese “colchón” y qué condiciones debes cumplir de forma disciplinada para que realmente funcione.