Sharing Co crece en flex. La compañía dirigida por Arco Galán y Jaime Bello pisa el acelerador en busca de nuevas oportunidades tanto para su rama inversora como en la gestora y ha comprometido ya treinta millones de los 300 millones de inversión que figuran en su hoja de ruta para los próximos cinco años.
Uno de los últimos movimientos de la compañía es la apertura de un nuevo espacio de coworking en Málaga, ubicado cerca de la calle Larios, tras la apertura de su primer centro en Madrid. En concreto, el centro se ubicará en el número dos de la calle Atarazanas, en un local donde antes se ubicaba una entidad bancaria, y cuenta con 600 metros cuadrados y una capacidad de 120 personas.
Sharing Co espera abrir el nuevo coworking a finales de septiembre, como tarde, después de invertir medio millón de euros en su rehabilitación. En este mismo edificio, la empresa adquirió el pasado año una planta para instalar apartamentos turísticos, otra de las principales ramas de negocio de la compañía.
Actualmente, la empresa tiene cerca de 200 apartamentos bajo gestión, agrupados en plantas y edificios enteros. “Estamos soltando el negocio granular”, asegura Jaime Bello, que apunta que la compañía se concentra en la compra de edificios enteros. Para cierre de año, la empresa estima contar una cartera de 250 apartamentos.
Sharing Co tiene cerca de 200 apartamentos bajo gestión, agrupados en plantas y edificios enteros
“Buscamos que la aportación de capital no sea intensiva, cuanta más tendencia a cero coste, mejor”, explica Galán, describiendo la estrategia de compra de la compañía, centrada en el crecimiento orgánico. “Cuando nos hayamos asentado en las plazas en las que estamos presentes, buscaremos crecer en otras ciudades”, apuntan desde la compañía, señalando Valencia como el siguiente paso de su expansión. “Nos gusta y nos es fácil visionarla a largo plazo”, confiesa Bello.
Para establecerse en nuevas ciudades, la compañía no descarta operaciones corporativas o la realización de alguna alianza a través de un joint venture. “A medio largo plazo, nos gustaría estudiar la expansión internacional con la apertura en alguna ciudad europea”, añade Galán.
Actualmente, la compañía está en proceso de abrir dos nuevos edificios para el alquiler de media estancia, uno ubicado en Madrid, de 33 apartamentos, y otro en Málaga, que cuenta con 14 apartamentos.
En cuanto a su negocio inversor, la empresa ha ejecutado un 80% de las operaciones en value add. “Con los proyectos que tenemos, que necesitamos un año y medio para ponerlos en marcha, buscamos producto core terminado listo para operar o que requiera una intervención muy rápida”, añaden desde la compañía. Para dentro de cinco o seis años, la empresa espera haber invertido 300 millones de euros.