El año pasado gané casi de 10 millones en Amazon: así nos convertimos mi marido y yo en vendedores y compramos la casa de nuestros sueños

En 1999, mi marido Andy y yo empezamos a trabajar en el orfanato de Milton Hershey School. 15 años más tarde, nos enteramos de que uno de nuestros amigos y compañeros estaba vendiendo productos en Amazon. Nos lanzamos a probar suerte y pronto nos enganchamos. No teníamos ni idea de que en 2022 estaríamos recaudando casi 10 millones de euros con las ventas en Amazon. 

Tuve una infancia difícil y, en ocasiones, violenta. Mis 2 padres sufrían trastornos mentales: mi madre tenía trastorno bipolar y acabó suicidándose, y mi padre, que padecía esquizofrenia, pasó la mayor parte de mi vida en la cárcel. Viviendo en Pensilvania, mi tía, que acabó cuidando de mí y de mis hermanas, nos matriculó a mí y a mi gemela en la Milton Hershey School.

Ese colegio cambió mi vida. Recibí una gran educación y vi las posibilidades que existían para mí. Después de conocer a mi marido en la universidad y graduarme, vivimos y trabajamos en Filadelfia durante unos años.

No teníamos un plan financiero para nuestras cuentas personales. Nos compramos una casa en la que invertimos muchísimo dinero, nos compramos coches nuevos. No parábamos de gastar. Mientras tanto, la decisión de volver a Hershey y convertirnos en padres de familia para niños con dificultades fue fácil.

Durante 15 años, ayudamos a criar a unos 100 chicos de secundaria y bachillerato, al mismo tiempo que criábamos a nuestros 2 hijos biológicos. Con el tiempo, nos dimos cuenta de que teníamos que ser más inteligentes con nuestras deudas. Fue entonces cuando nuestro amigo nos habló por primera vez de Amazon y nos convertimos en vendedores en 2016.

La clave de nuestro éxito en Amazon fue detectar rápidamente las tendencias y seguirlas de cerca

Al principio, vendíamos libros usados de bibliotecas que cerraban o de tiendas de segunda mano, porque eso era lo que vendía nuestro amigo. Luego pasamos a un montón de artículos aleatorios: pistolas nerf, Legos y un montón de cosas más.

Para revender un artículo en Amazon, basta con entrar en cualquier tienda y escanear el código de barras del artículo con una función de la aplicación para vendedores.

La aplicación muestra los posibles márgenes de beneficio y el valor que el producto tendría en la plataforma de Amazon. Nuestro planteamiento consistía en comprar únicamente productos que pudieran duplicar nuestra inversión, de modo que pudiéramos cubrir fácilmente las tarifas de vendedor, las suscripciones a la aplicación y los gastos de envío.

Cuando salió la película de Frozen, vimos una oportunidad de oro para potenciar el negocio.

Vivíamos cerca de un montón de puntos de venta y a mi marido se le ocurrió combinar las chanclas de Frozen con una toalla con capucha para la playa también de la película: hizo 200 packs y se vendieron como churros. Las grandes tendencias como Frozen se venden rápido y se puede ganar mucho dinero antes de que desaparezca la fiebre por el fenómeno.

Si se diese el caso de que encontrásemos una tendencia comercializable y pudiéramos conseguir una cantidad adecuada de productos, pero no hubiera tiempo suficiente para llevarlo a un centro de distribución de Amazon, lo venderíamos en eBay. Vender en eBay es más rápido porque enviamos el producto directamente al cliente.

Mientras Andy se dedicaba por completo al negocio de Amazon, yo me quedé en el Milton Hershey School desarrollando planes de estudio. Estuve haciendo esto durante 3 años para tener algo seguro mientras hacíamos crecer los ingresos a través de Amazon. En ese momento, incluso nuestros hijos nos ayudaban con el embalaje, el envío y todo lo que podían.

Tardamos 2 años en generar beneficios estables en nuestro negocio de Amazon

Durante el primer año, nuestros beneficios apenas alcanzaron el punto de equilibrio. Ganábamos lo suficiente para mantener nuestra cuenta de Amazon abierta y cubrir los gastos de preparación y envío, pero no era nada con lo que pudiéramos vivir.

No podíamos dedicarle al negocio todas las horas que nos gustaría porque seguíamos teniendo responsabilidades como padres y en mi trabajo, y hacer el seguimiento de los productos era muy estresante.

Decidimos cambiar nuestra estrategia y buscar artículos con mayores márgenes de beneficio, como herramientas y muebles, e investigamos más productos que no estuvieran tan saturados. Nos arriesgábamos con apuestas como estas y a veces nuestras compras no salían bien.

En esos casos, reducíamos el precio de venta solo para deshacernos del inventario antes de que las tarifas de almacenamiento de Amazon se comieran el resto de nuestra inversión.

Una noche, antes de meternos en la cama, configuramos un código a modo de cupón para atraer a más clientes. Pero, con las prisas, lo configuramos mal, poniendo el precio a 0 euros. La genial idea se convirtió en un producto gratuito que nos costó casi 12.000 euros en pérdidas. No nos dimos cuenta hasta por la mañana, cuando ya era demasiado tarde.

En 2017, Andy creó una marca propia de pañales de tela para vender en Amazon. Ese producto creció tanto y tan rápido que vendimos la marca a un nuevo propietario en 2020, algo que nos permitió concentrar nuestra energía en nuestro negocio de jardín que queríamos lanzar. Estas ventas nos permitieron comprar la casa de nuestros sueños.

Vender en Amazon requiere planificación, inversión y asumir riesgos

Para empezar a vender en Amazon, hay que asumir riesgos. No hay que tenerle miedo a lanzarse con un producto que tiene potencial. Si se espera a ver qué pasa, alguien podría registrar el producto o reclamar la propiedad intelectual, sobre todo si el fin es crear una marca propia como hicimos nosotros con los pañales de tela.

Cuando se trata de adquirir productos en Amazon, hay que conocer el presupuesto, el valor del producto y si se pueden reinvertir con éxito los beneficios. Cuando obtienes ingresos, debes tener la disciplina de reinvertirlos en el negocio, porque así es como se gana dinero. Además, nunca sabes qué tipo de gastos tendrás que cubrir para hacer crecer el negocio.

No quiero que los nuevos vendedores piensen que deben ampliar su negocio antes de pagar las deudas. Cuando empezamos a vender en Amazon, mi marido y yo utilizamos nuestros ingresos para pagar las tarjetas de crédito y salir de deudas.

Ahora ganamos lo suficiente para invertir dinero en el negocio y dejarlo crecer. El año pasado hicimos casi 10 millones de euros en ventas y empleamos a un equipo de 47 personas a las que podemos pagar cómodamente para que lleven nuestro negocio de Amazon.

Para convertirte en un vendedor de éxito en Amazon utiliza tu imaginación

Yo les aconsejo a los nuevos vendedores que piensen en cómo venderían un producto para destacarlo entre la competencia en una época del año muy ajetreada. Existe la opción de agrupar artículos como hizo Andy antes del estreno de Frozen con las chanclas y las toallas.

O por ejemplo, durante las Navidades, podrían buscar cuernos de reno luminosos para adultos, pero también cuernos para perros y bebés.

Una cosa que aprendí por experiencia es que, cuando se trata de negocios, hay que seguir intentándolo. No quiero decir que no exista el fracaso, pero siempre hay otras opciones. Si una forma de operar no funciona, hay que probar otra.