¿Es arriesgado quedarse en un alojamiento de Airbnb sin reseñas?

Airbnb es un referente a la hora de buscar un alojamiento para una escapada o unos días de vacaciones.

La popularidad de la plataforma en los últimos años ha alcanzado cifras estratosféricas y, en consecuencia, la seguridad y fiabilidad del portal también se han visto comprometidas.

Desde aquellos que aprovechan el éxito de la plataforma para poner anuncios falsos hasta las reseñas demasiado perfectas, el usuario se enfrenta en cada búsqueda a una serie de obstáculos que le deben hacer dudar de si está ante el anuncio que cumplirá con las expectativas de su ansiado viaje.

Airbnb trata de poner fin a todos estos problemas con constantes actualizaciones que elevan la barrera frente a los fraudes, pero, como es normal, el sistema no es perfecto y entre sus grietas se cuelan algunos alojamientos que no cumplen las normas (o incluso ni siquiera existen).

Aunque en líneas generales Airbnb es un lugar seguro, no deberías fiarte de todo lo que encuentres y uno de los métodos para filtrar anuncios son sus reseñas, las cuales pueden alertarte sobre una potencial estafa.

Los comentarios que han dejado anteriores huéspedes sobre el anfitrión y el alojamiento que estás mirando pueden indicarte más de lo que piensas.

Por un lado, debes fijarte en que los anfitriones tengan un perfil completo en la plataforma que incluya todos sus datos y reseñas de otros usuarios. Si el perfil del anfitrión cuenta con la insignia Superhost superanfitrión– de Airbnb, tendrás la mitad del trabajo hecho, ya que certifica que su trayectoria en la plataforma ha sido buena y ha superado ciertos parámetros positivos.

Si el anfitrión que has encontrado no tiene reseñas, no significa que necesariamente se trate de una estafa potencial. A veces, solo indica que el anfitrión acaba de unirse a la plataforma. Revisa también si el anfitrión cuenta con otras propiedades: es posible que esos anuncios ya cuenten con reseñas mientras que el que tú estés mirando sea nuevo.

Más allá de la existencia o no de reseñas, una señal de que podrías estar ante una estafa es cuando el alojamiento que buscar parece demasiado bueno (y barato) para ser verdad. Si la localización es perfecta, el precio muy bajo, el apartamento derrocha glamour y las fotos son muy profesionales, solo hay dos opciones: acabas de encontrar la mejor oferta de internet o estás ante un fraude que arruinará tus vacaciones. Si no quieres jugártela, sigue mirando.

Si te sigue interesando ese alojamiento en concreto, prueba a buscar el mismo anuncio en otras plataformas. Es habitual que los anfitriones publiciten sus propiedades en varios portales o incluso en webs propias. Eso sí, nunca hagas el pago del alquiler fuera de los sitios oficiales o el riesgo correrá de tu cargo.

Sin embargo, y aunque son muy importantes, las reseñas no lo son todo. Puedes encontrar usuarios que han dejado puntuaciones demasiado generosas en un intento de no perjudicar al anfitrión, mientras que otros hacen de un pequeño problema un mundo, afectando negativa e inmerecidamente a la puntuación de su estancia.

En definitiva, fíate de tu instinto, pero con cautela.