Ahorrar dinero es una tarea difícil debido a que el cerebro está acostumbrado a pensar en las recompensas a corto plazo. Por eso te cuesta resistir tentaciones y caprichos.Así que no te preocupes si te encuentras en fase de ahorros pero te está costando más de lo que pensabas.
La clave para engañar a la mente y ahorrar a diario sin esfuerzo consiste en implementar pequeños cambios con un gran impacto económico.
Da igual si estás ahorrando para una futura gran compra, para crearte un colchón económico, para saldar deudas, prepararte para imprevistos… Independientemente de tu situación, estos 109 trucos y consejos te ayudarán.
Los trucos están divididos en categorías que a su vez abarcan casi todos los ámbitos de tu día a día: trabajo, compras, casa, viajes, entretenimiento…
Primero empezarás con métodos y técnicas de ahorro en general, por si te apetece un buen reto, y luego ya descubrirás consejos más específicos. Elige una docena de ellos y ponte en marcha. ¡Notarás cambios enseguida!
Métodos y sistemas
1. Prueba la técnica de los sobres
El problema de pagar siempre con tarjetas de crédito es que puedes perder fácilmente la cuenta de lo que gastas cada mes. Una buena alternativa es sacar X dinero cada mes y ponerlo en sobres. Puedes titular los sobres según la cifra máxima que contengan, su propósito («comida», «ropa») o su marco temporal («semana 1», «semana 2″…).
Este truco te permite descubrir visualmente cuánto dinero te queda según la situación… y descubrir además tus problemas para ahorrar. Por ejemplo, si el sobre de la semana 2 termina el martes, significa que te cuesta frenar tus impulsos al poco de cobrar. Si acabas cogiendo dinero del sobre de la comida para llenar el de la ropa, ya tienes un tipo de consumo que debes aprender a controlar.
2. Usa el método 50/30/20
El método 50/30/20 no consiste en realizar cálculos matemáticos, sino en reservar un 50% de tu salario a las necesidades del hogar (pagar facturas, la comida, saldar deudas…), un 30% a diversión (comer fuera, ocio, caprichos…) y un 20% dedicado a tu futuro yo (eso es, ahorrar y solo gastar estos ahorros en caso de emergencias o inversiones).
Este ratio no está forjado a fuego ni debe seguirse a rajatabla. Puedes alterarlo de la forma más adecuada a tu situación económica. Lo importante de este método es ser constante con él, y aprovechar el concepto del «futuro yo» para motivarte a ahorrar.
3. Experimenta con la regla de los 30 días
La regla de los 30 días es muy sencilla. Cuando quieras comprar algo que cueste mucho dinero y no sea estrictamente necesario para tu supervivencia, espera 30 días y entonces preguntáte de nuevo si lo necesitas.
Pasado ese lapso de tiempo, eguramente esas ansías que tenías por obtener aquel objeto se habrán desvanecido, o debilitado.
4. Experimenta con la otra regla de los XX días
Esta regla es prima segunda de la de más arriba. El concepto es el mismo (esperar unos días antes de volver a preguntarse si quieres comprar algo), solo que el número de días a esperar equivale al precio del producto.
Por ejemplo, si quieres unos zapatos que cuestan 80 euros, espera 80 días antes de preguntarte de nuevo si lo necesitas. Este método es muy efectivo para evitar la tentación de comprar caprichos caros.
5. Al menos dale una oportunidad a la regla de las 24 horas
Si las 2 reglas de más arriba te parecen muy duras, o las has intentado pero te cuesta aguantar tanto tiempo, prueba esta versión más fácil.
¿Quieres comprar este nuevo libro que ha salido en tapa dura que cuesta más que su inminente edición en bolsillo? Espera solo 24 horas. Mañana vuelve a preguntarte si lo quieres. Si es así, adelante. Si tienes dudas, espera 24 horas más.
6. Practica la visualización
La visualización es una técnica muy sencilla que se realiza sobre todo en el mundo de los deportes. Antes de un partido, enfrentamiento o prueba, el deportista / atleta se pasa días visualizando ese momento para, cuando llegue dicho desafío, realizarlo de la forma más óptima posible.
Durante unos días, haz lo mismo: visualízate yendo de compras o realizando tareas diarias, solo que en lugar de actuar como siempre, lo haces de forma que mantienes tus objetivos de ahorro. Aquí lo importante es la constancia: ¡practica a diario!
7. Convierte tu dinero en horas de trabajo
Si por ejemplo ganas 10 euros por hora, no pienses que estos zapatos cuestan 80 euros: piensa que te cuestan 8 horas de trabajo, es decir, toda una jornada laboral.
Verás que, al pensar que tu esfuerzo puede malgastarse, empezarás a ser más consciente y cuidadoso con tus compras.
8. Prueba con el reto del céntimo
El reto del céntimo te permite ahorrar 667,95 euros durante todo un año si lo aplicas día a día. Es muy sencillo: el primer día empiezas ahorrando solo un céntimo de euro, y vas añadiendo un céntimo cada día. Al cabo de un año ahorrarás 3,65 euros diarios.
Existen diferentes variaciones de este reto. Puedes empezar el día uno ahorrando 3,65 euros y cada día bajar la cifra de ahorro en un céntimo. También puedes optar por el método desordenado, en el que cada día ahorras una cantidad diferente y aleatoria (solo recuerda de tachar esa cantidad para no repetirla).
9. El reto de las 52 semanas
¡Otro desafío! En este caso se parece al del céntimo. Coge un bote, una caja, una hucha… y pon en ella un euro. A la siguiente semana, añade 2 euros. A la semana 3, introduce 3 euros…
Cada semana añade la cantidad den un euro y en 52 semanas / un año habrás ahorrado la nada desdeñable cantidad de 1.378 euros.
10. Crea una carpeta de sueños a largo plazo
Si te cuesta horrores ahorrar, seguramente te falta una motivación muy grande que te ayude a encontrar energía y persistencia. Un buen método para encontrar dicha motivación es crearte una carpeta de sueños.
Crea una carpeta en tu PC, o hazte una física, e incluye imágenes de todo lo que te podrás comprar una vez hayas ahorrado una gran cantidad de dinero: ese coche que tienes ganas de conducir, una casa nueva más grande… Consulta esa carpeta a diario para recordarte por qué estás ahorrando.
11. Utiliza la regla del 1%
Esta regla se parece mucho a los trucos de esperar X horas antes de comprar algo. Es muy sencillo: si quieres comprar algo que no es esencial pero que cuesta un 1% más que tu salario anual (por ejemplo, más de 300 euros si ganas 30.000 al año), entonces espera 24 horas antes de comprarlo.
Esta espera aparentemente mínima e inocua seguramente conseguirá que desaparezca ese impulso de dopamina inicial que nublaba tu juicio y casi te ha convencido para que te compras ese capricho. Es casi seguro que, pasadas esas 24 horas, ya no tengas tantas ganas de comprar ese objeto.
12. Prueba a no gastar nada en una semana
Este desafío puede parecer durillo, pero si consigues superarlo te aumentará la disciplina para ahorrar. Consiste en no gastar nada, absolutamente nada, durante una semana.
Eso implica no poder comprar comida o necesidades básicas. Para conseguir tamaño reto, deberás realizar las compras imprescindibles de esa semana antes de que esta empiece. El objetivo, más allá de ahorrar, es que aprendas que es posible mantener tu dinero intacto durante largos períodos de tiempo. Te ayudará en el futuro.
Entretenimiento
13. Crea una cuenta compartida con amigos o familiares
Netflix, Spotify, Xbox Game Pass, Nintendo Online, Youtube Premium… si usas muchos servicios online de suscripción, seguro que la cifra total es más elevada de lo que pensabas.
Una buena forma de ahorrar es hablar con amigos o familiares que usen los mismos servicios y crear una cuenta compartida para pagarla a partes iguales. Hay servicios como Spotify que tienen promociones para cuentas multitudinarias. En otros casos, como con Netflix, es hacer trampichuelas. Pero cuando de ahorrar se trata, todo vale.
14. Descubre el paraíso gratuito que es Internet Archive
Internet Archivees, literalmente, la biblioteca de Internet: allí se guardan copias digitales de todo tipo de libros, películas, documentales, revistas, videojuegos antiguos…
Si tienes ganas de leer o ver una peli, pasa una tarde en Internet Archive y descubrirás que hay una gran cantidad de material gratuito esperando a ser consumido.
15. Sí, se pueden ver películas y series por streaming gratis
Más allá de Internet Archive, existen muchas webs que te permiten ver películas y series por streaming de forma gratuita y 100% legal.
Tienes ejemplos como Atresplayer, eFilm, FilmOn, MicroCanales, MiTele… incluso Netflix tiene un poco de su catálogo en abierto.
16. Repasa todas tus suscripciones
A colación del truco de más arriba, aprovecha la oportunidad para repasar y hacer una lista de toooodooos los servicios de suscripción que estás pagando.
Una vez los tengas controlados, hazte la inevitable pregunta «¿Estoy usando con frecuencia Netflix o Spotify?». Si la respuesta es un «No» tajante, cancela o pausa la suscripción.
17. Ve a la biblioteca
Los libros son una fuente casi inagotable de conocimientos, y los de ficción avivan tu creatividad y te ayudan a desarrollar la empatía. ¡Pero pueden ser muy caros! Sobre todo si los compras de tapa dura o te los devoras enseguida.
Considera hacerte socio de la biblioteca pública más cercana y coge los libros prestados. Si descubres que hay una novela que ya has releído 4 o 5 veces, entonces sí, cómprala. Y aprovecha para organizar sesiones de lectura en tranquilidad dentro de la biblioteca. Verás que el silencio te ayuda a comprender mejor lo que lees.
18. No solo hay libros en la biblioteca
Si crees que en tu biblio cercana solo hay libros, ¡es que hace tiempo que no vas!
En una biblioteca puedes pedir prestados películas, documentales, cómics e, incluso en algunos casos, hasta videojuegos. Así que antes de comprar o alquilar algunos de estos ítems, consulta que no estén disponibles en tu biblio cercana.