Siempre me ha gustado construir cosas, y empecé a diseñar aplicaciones para iOS cuando estaba en secundaria. Crecer en el Área de la Bahía de San Francisco (Estados Unidos), conocida por ser el centro de toda innovación, también me ayudó a cultivar esa mentalidad empresarial de trabajo duro y aprendizaje sobre la marcha.
En los últimos tres años de universidad, mi pasión por construir cosas resurgió, y se me ocurrió la idea de mi startup, Energize AI. Mi idea de Spark, un asistente de programación de IA, se inspiró en lo que hacía en la universidad y en lo difícil que es coordinar todos los compromisos.
En la actualidad, trabajo en Spark por mi cuenta y estoy en proceso de pasar del acceso privado al público. Ya tengo algunos clientes de pago, lo que aumenta la necesidad de fiabilidad. Spark recibió una subvención de 100.000 dólares de OpenAI el año pasado.
Compagino el trabajo en la startup con mis estudios de Informática a tiempo completo en Harvard. Asisto a cuatro o cinco clases cada semestre y me reúno con empresas y clientes. Trabajo unas 85 horas a la semana en la startup, la mayor parte del tiempo escribiendo código.
También me desplazo constantemente entre San Francisco, donde tengo mi sede, y el campus de Harvard en Boston.
Estas son tres formas de compaginar mis compromisos con la startup y la universidad:
Bloques de tiempo
Una estrategia que me ha funcionado bien es programar mi tiempo en la medida de lo posible. Yo decido cuándo son mis horas de reunión y cuándo son las demás, e intento atenerme a ello en la medida de lo posible.
Es la mejor manera de mantenerme concentrado.
Por ejemplo, atiendo tres horas de llamadas, seguidas de un gran bloque de tiempo para programar y trabajar en la mejora de Spark.
Me ha ayudado a reservar tiempo libre, porque hay una gran diferencia cultural entre el mundo académico y el de las startups.
Ojalá hubiera un entorno más amigable para los jóvenes fundadores. Entre mis compañeros de Informática, hay muy pocos dispuestos a arriesgarse y crear algo diferente.
Tomador de notas de IA
Mi próximo objetivo es que tres grandes empresas utilicen Spark en toda su estructura, lo que me obliga a participar en muchas reuniones.
Utilizo una IA para tomar notas, para asegurarme de que puedo concentrarme en la conversación y no distraerme anotando cosas. Estos anotadores transcriben la conversación y hacen un resumen fácil de consultar más tarde.
Distracciones planificadas
Cuando empecé en Harvard, quería aprovechar al máximo los cuatro años y conocer a gente interesante, como la que cursa artes liberales.
No he podido hacer esto tanto desde el semestre pasado, ya que Spark se ha convertido en mi prioridad. Pero he descubierto que las artes son una distracción útil entre todas las reuniones, clases y exámenes.
Un consejo de productividad que me ha ayudado ha sido tomar muchas clases de pintura, fotografía o medios visuales en Harvard. Me han servido para relajarme de muchas formas.
Ir al gimnasio por las tardes me ha ayudado mucho a despejarme. Suele ser la parte más dura de mi día, y mis otras tareas, como asistir a reuniones o escribir código, no parecen gran cosa en comparación a levantar grandes pesas.