Gonzalo Bernardos: los jóvenes de ahora son «los mejor formados de la historia», pero padecen «mamitis» y «no aprovechan las oportunidades»

El economista Gonzalo Bernardos ha alabado a los jóvenes españoles de hoy como los «mejor formados de la historia», pero al mismo tiempo los ha criticado por adolecer especialmente de una «enfermedad»: la «mamitis y papitis».

En una entrevista con Noticias Trabajo, Bernardos ha negado que la generación juvenil de la actualidad tenga menos oportunidades de progreso que las anteriores.

«Los jóvenes de ahora son los jóvenes mejor formados de la historia, los jóvenes que tienen el mayor colchón familiar de la historia. Ahora bien, yo, para mi parecer, veo muchas quejas y no veo que aprovechen las oportunidades. La principal enfermedad de este país se llama mamitis y papitis. Dejémoslos que vayan por su cuenta, que hagan lo que quieran», ha afirmado.

«No estoy contra los jóvenes. Son la generación más preparada; excesivamente consentida, excesivamente intervencionista por parte de los padres. Se han tenido menos hijos y se han querido mimar hasta la extenuación», prosigue el profesor de Economía de la Universidad de Barcelona.

«Mimar un poco es positivo», concede, pero «hacer de doble del hijo», que padres y madres estén encima —»principalmente para que no se equivoquen, para que no cometan los mismos errores»— y muy preocupados por casi cualquier cosa que hacen, «es un problemón», ha advertido.

A partir de esa dependencia económica y emocional que les atribuye, Gonzalo Bernardos considera que los jóvenes de la actualidad son «culpables de sus pocas ganas de progresar en el trabajo», porque «mamá y papá se lo han dado todo hecho».

Según Bernardos, no hay que envolver a los hijos «en papel celofán» ni tratar de evitarles cualquier problema, dificultad o equivocación: la clave estaría, con base en su propia experiencia, en «que tomen decisiones, porque si se equivocan, aprenderán». «Tira para adelante, que no pasa nada si te equivocas… ya rectificarás», añade.

«Cuando más he aprendido en esta vida es cuando me he equivocado, y me he equivocado muchísimas veces; si no lo hubiera hecho, no habría aprendido», recuerda el economista, que afirma utilizar ese método con sus hijos: «Las palabras son siempre las mismas: ‘Haz lo que creas oportuno'».

El también doctor en Economía y consultor inmobiliario extrapola finalmente este tipo de situaciones también a la vivienda: cuando él se compró una casa después de terminar su carrera universitaria, su padre «no miró absolutamente nada a pesar de que era un gestor que estaba especializado en esto», rememora.